jueves, 22 de febrero de 2018

El trabajo y la Familia

Proverbios 10:4 Las manos ociosas conducen a la pobreza;  las manos hábiles atraen riquezas.
La Biblia es muy clara al hablar acerca de la diferencia entre alguien que es pobre y alguien que es simplemente flojo. Muchas personas no tienen nada porque no hacen esfuerzos para ayudarse a sí mismos. Esto es inaceptable. Sin embargo hay mucha gente floja en nuestra sociedad.
Este asunto a menudo se transforma en algo político cuando realmente es un asunto bíblico. DIos espera que nosotros trabajemos usando todas nuestras habilidades para proveer para nuestra familia. Entonces estaremos en condiciones de enseñar a nuestra familia cómo proveer para ellos mismos, y que eso debería continuar en las futuras generaciones. Para inculcar este valor en nuestros hijos y ayudarles a apreciar la diferencia entre la flojera y el trabajo duro, es una buena idea trabajar juntos como familia para completar tareas rutinarias y otros proyectos que tengan que ver con la casa.
Involucrar a tus hijos en esto puede que haga la tarea un poquito más lenta o que no sea haga exactamente como tú la querías. Pero recuerda, eso está bien, porque a la larga tú estás enseñándoles a ellos cómo trabajar. Enfócate en la meta superior. Eso es lo más importante.

Principio de crianza  
Dale todo a un niño y él nunca dejará de pedir. Enseña a un niño a trabajar y ellos nunca dejarán de dar.

Para reflexionar
  • ¿Cómo defines a un buen trabajador?
  • ¿Qué tareas rutinarias de acuerdo a su edad están aprendiendo tus hijos?
  • ¿Cuál es la forma en que ustedes podrían trabajar juntos como familia?

(Traducido de Devocional NVI por Pr. Javier Menénedez)

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