martes, 28 de julio de 2015

3 Personajes Extraordinarios - T.A. EDISON


En estas últimas semanas aprendí algunas cosas interesantes de 3 personajes icónicos: Thomas Alva Edison, Walt Disney y John Wimber. En los siguientes reflexiones voy a hablar de algunos valores que cada uno de estos líderes representan, como esos valores se reflejan en la Biblia y qué podemos aprender de ellos.

El primero será Edison.  En nuestro reciente viaje a USA llevamos a nuestras hijas a la casa, ahora museo, de este personaje, en Fort Myers en Florida. Fue un día de lluvia, mucho calor y de comer mangos en el patio de la casa de Edison, pero también aprendimos algunas cosas. Por ejemplo; THOMAS ALVA EDISON fue uno de los más prolíficos inventores del siglo XX. Más de 1000 inventos patentados con su nombre, hacen de él un verdadero genio. Sus descubrimientos, innovaciones y publicaciones tuvieron gran influencia en campos como la electrónica, la química y el entretenimiento. A Edison se le atribuyen inventos como el fonógrafo y la ampolleta (foco, bulbo incandescente), la primera muñeca parlante, los primeros prototipos de cámaras de cine y los primeros paneles solares y el  generador eléctrico entre muchos otros. Sin embargo a mi modo de ver, una de las contribuciones mayores de Edison a la ciencia se expresa en algunas de sus frases más celebres. “El científico se forma por un 1% de inspiración y un 99% de transpiración”. Se dice que antes de encontrar la clave para inventar la ampolleta, trabajó en alrededor de  300 teorías fallidas donde el experimento no funcionó. Al ser consultado acerca de este hecho, el respondió “Yo no he fracasado. Sólo he encontrado 300 formas en que la ampolleta (foco) no funciona.
Cuando haya descartado todas las posibilidades que no funcionan, encontraré la que sí funciona”.
Realmente esto es lo que me impactó de su vida, más que sus inventos, que ya son increíbles, me impresiona su actitud de perseverancia.  Si queremos una vida fructífera, relaciones que perduren y alcanzar nuestras metas, necesitamos una gran dosis de perseverancia.
Existen miles de visionarios en el mundo, pero los que son recordados son sólo aquellos que tienen la perseverancia suficiente para persistir hasta ver su visión hecha realidad. 
En su carta a los Colosenses, San Pablo relaciona directamente la gracia con la perseverancia. Les escribe y les  hace saber de que se enteró acerca de que ellos habían llegado a Cristo por Su gracia y que estaban dando fruto. En su carta les anima: Por eso, desde el día en que lo supimos no hemos dejado de orar por ustedes. Pedimos que Dios les haga conocer plenamente su voluntad con toda sabiduría y comprensión espiritual, 10 para que vivan de manera digna del Señor, agradándole en todo. Esto implica dar fruto en toda buena obra, crecer en el conocimiento de Dios 11 y ser fortalecidos en todo sentido con su glorioso poder. Así perseverarán con paciencia en toda situación,  dando gracias con alegría al Padre. (Colosenses 1:9-11)
¿Cómo podemos los cristianos permanecer firmes y constantes (perseverantes) en medio de problemas, enfermedades y la presión de un ambiente laboral de moralidad decadente?, ¿Cómo podemos perseverar en conservar  relaciones  sanas y  vivir en integridad?
A diferencia de Edison, la perseverancia para los cristianos no es solamente una porfiada determinación de  hacer algo, o cumplir una meta.
Este pasaje menciona 2 veces la palabra “conocer”. La perseverancia cristiana se basa en conocer a Cristo y Su voluntad (v.9-10).
Conocer a Cristo implica mucho más que ser salvo. Tampoco es conocer mucho de teología. Conocer a Dios involucra desarrollar una relación diaria de amor con Dios. En esta relación de amor Dios mismo te revela Sus propósitos y dirección. Cuando tienes un propósito en la vida y una dirección hacia donde ir con Él, nada te podrá detener. Ni los fracasos, ni los problemas, ni las enfermedades.  
Sólo una relación con Dios renueva tu visión y te fortalece para que puedas perseverar.
¿Estás pasando por situaciones que te empujan a dejar de lado tus metas, o a claudicar en tu fe? Involúcrate en una relación personal con Dios. Orando, leyendo tu Biblia y adorando podrás refrescar tu visión, encontrarás descanso y renovarás el propósito que tienes en Cristo. Esto es lo único que te puede dar verdadera fortaleza para perseverar en medio de la adversidad.
Que Dios te bendiga!